19:55. 02/04/16. Este ha sido uno de esos momentos en los que hay total desencuentro entre lo que me apetece hacer y aquello que «debería» llevar a cabo si lo que quiero es alcanzar mis objetivos.

Lo que me pide el cuerpo es que me tumbe en el sofá, que descanse y me relaje, que se me pase el rato de tarde que me queda por delante viendo alguna de esas pelis que llevan en la recámara de «esas cosas que tengo muchas ganas de hacer pero que nunca hago» desde hace ya demasiado tiempo. En ese momento de duda total, de lucha entre el debo y el quiero, me viene a la cabeza una frase que escuché hace unos días en una conferencia…»El primer pensamiento que te viene a la cabeza es inevitable, del segundo ya eres responsable» .

Así que, con este recordatorio de algo que es muy cierto pero que a veces olvido, me rearmo con toda mi motivación como bandera y con la ilusión por alcanzar uno de mis objetivos como motor de arranque para volver a esta silla a pasar lo que me queda de tarde.¡Vamos a por ello!

«No hay nada mejor que una buena justificación, una excelente excusa, para poner nuestra conciencia a dormir».